*Que la PENA se transforme en MILITANCIA*

Aprendi de politica escuchando a mi viejo. Mi viejo no hablaba de politica, mi viejo daba cátedra. Fue protagonista de los momentos mas importantes de la historia argentina que le fuera contemporanea. 

Tuvo la vivencia concreta de lo que significo Evita para el Pueblo, en el Orfanato donde vivio de chico unos años junto a dos de sus cuatro hermanos. Hasta que llego el Peronismo, en ese lugar se maltrataba y estigmatizaba a los chicos que alli vivian, haciendolos sentir menos que nada. Pero llego Evita, y aunque a su corta edad no entendia de politica, entendio el amor y la proteccion que ella les brindaba. Se acabaron los delantales grises y esas gorras identificatorias del Hogar, que los señalaba como huerfanos adonde fueran, se acabaron los guisos de cosas imposibles de descifrar, se acabaron los maltratos por que si, y los castigos inhumanos. Estreno por primera vez pantalones, cortos como correspondia a su edad, y la comida empezo a parecerse a la de su mamá, tambien regalos para Navidad y el Dia del Niño... ¿Como no amar a Evita?¿Como no quedar signado por la rebeldia al autoritarismo despota del que ostenta el poder frente al mas debil?

En el 55, justo, justito, estaba haciendo la Colimba cuando el primer intento de Golpe contra Perón se desató. Vivencío la crueldad contra el Peronismo en su maxima expresion, vio pisotear frente a él cuadros de Eva y Peron, escucho gritos de rencor y bajeza, y la orden expresa de la prohibicion de nombrarlos, bajo pena de horrorosos castigos, de los que fue testigo. Hasta la llegada de uno de los Jefes del Ejercito, que dirigiendose a los soldados, los desafio a dar un paso al frente a los peronistas. No podia quedarse callado, no podia negar a Peron y a Evita, ni su pertenencia al Movimiento, ni a sus convicciones...Y alli delante de toda la compañia formada dio un paso al frente, aun temiendo que lo fusilaran o torturaran, no podia hacer mas que hacerse cargo de sus ideas... Solo cuatro dieron ese paso al frente, aun cuando la gran mayoria era peronista. Esta temeraria jugada que no sabia como terminaria, le valio que le dieran la baja del servicio militar.

Conocio a Perón en Madrid, en Puerta de Hierro, donde concurrio como representante del Sindicato de Luz y Fuerza, junto a algunos compañeros. Escucho de boca del Gral la anecdota de la chicana a Lanusse que respondio con aquel famoso "No le da el cuero para volver", que fue el comienzo de los preparativos del regreso a la Argentina. Tambien escucho aquella sentencia de Perón, de que los que estan demasiado apurados son "contrarevolucionarios" y de que a él no le pasaria lo de Allende..."Dejen que los llamen burocratas muchachos...", les aconsejo.

El gobierno de Campora, el regreso de Perón, Ezeiza. (La primera vez que me llevo a Plaza de Mayo fue el 1º de Mayo de 1974, huella imborrable en mi vida). Despues vendria el desconsuelo con la muerte de Perón. Isabel a cargo del gobierno, la sombra del brujo y la debacle politica y social del pais. Y luego la oscura noche de la Dictadura, el terror, la persecusion, la clandestinidad, la injusticia, la desaparicion del Negro Smith, las traiciones, el dolor y la impotencia, la Marcha Peronista y la del Sindicato cantada a los gritos todos los 1º de año en mi casa, a modo de rebeldia y resistencia, todos de pie revoleando servilletas como banderas y los dos dedos en V. Siete años que no terminaban nunca, durante los cuales los dias se contaban uno a uno como en la carcel...La Guerra de Malvinas, el sacrificio de tantos chicos de mi generacion, mucha mas bronca e indignacion...

El retorno de la democracia, aquellas elecciones del 83, donde empezamos a discutir de politica. A el le gustaba Alfonsin, y lo voto convencido, pero el era peronista. Yo en plena adolescencia, vociferaba contra el partido y lo cuestionaba...Terminabamos siempre igual, yo con lagrimas de impotencia y el con ternura condescendiente, sentenciandome que ya lo iba a entender mas adelante.

A partir de ahi, nuestras discusiones eran cada vez mas fuertes, y yo me esforzaba por leer y saber mas, para poder argumentar con mas autoridad, por que era muy dificil retrucarle sin quedar expuesta si en algo flaqueabas. Siempre terminaba sin respuestas, por que el siempre redoblaba la apuesta y a mi no me daba el paso para alcanzarlo.

Pero, llego el 2003, y llego Nestor. Y ahi, logramos por fin, congeniar...( Mira vos, hasta eso le debo al flaco y a Cristina), empezó a ceder en algunos puntos de las discusiones, a aceptar que no era imposible ir contra el establishment y los milicos, a entender que no era una utopia el juicio y castigo a los culpables. Y despues vino Cristina, "¡Que mina!", decia. Y a mi, acostumbrada a escucharlo desde su postura machista, se me hinchaba el pecho de orgullo de genero por la reivindicacion del lugar de la mujer en la politica... ¡ EN BOCA DE MI VIEJO! :o))

Empezamos a escucharnos mejor, a complementarnos, pude escucharlo sin pensar en que le iba a responder, y empezo a escucharme con interes y atencion. Intercambiabamos informacion, nos mandabamos noticias y datos por mail, y empece a sentir que cuanto yo mas crecia en mis argumentaciones, lo iba despidiendo de a poquito. Recuerdo una vez en que la melancolia me sorprendio pensando en como me gustaria encontrarme de nuevo con mi viejo de entonces, teniendo hoy una discusion mano a mano conmigo... Creo que ahi empece a asumir que el tiempo juntos se acababa...

En los ultimos tiempos, ya decaido con su enfermedad, los momentos de mayor lucidez y energia, era cuando hablabamos de politica. ¡ Que nadie osara decir nada contra Nestor y Cristina! Y asi, todos los dias un ratito, conversabamos de la actualidad, de oficialismo, de oposicion, de estrategias de gobierno, de paralelos con la historia, de traidores y traiciones, y de su eterno temor de que yo participara de politica y me lastimaran..."Nena, en politica hay mucha mugre, sos muy idealista tenes que cuidarte", me decia cada vez que podia. La nena, tiene hoy mas edad que la que el tenia en plena Dictadura, pero para el, yo siempre iba a ser chiquita e ingenua...

Los ultimos dias, ya agotado y sin fuerzas, yo le hablaba y el solo me escuchaba y asentia. Una de las ultimas cosas que vimos juntos era el discurso de Cristina en el acto de la CGT, que grabe y se lo hice escuchar en la notebook. Se sonrio escuchandola como retaba a Moyano por no considerarla una trabajadora. "Estuvo bien, le marco la cancha pero no fue agresiva", me dijo. Despues lo escuche repitiendo algunas frases mias, en una charla con un amigo, como yo antes hacia con sus palabras y analisis. Y ahi entendi que el circulo se estaba cerrando...

Y se me fue una noche en que entendio que ya no podia luchar mas, que habia resistido todo lo que podia, pero que ya era hora de descansar despues de una vida entera peleandola para sobrevivir... Otros enemigos, pero su lucha era la misma.

Y a los 6 dias se nos fue Nestor...Y ahi la vida volvio a golpearme hondo, sobre la herida fresca. Dejandome huerfana de toda horfandad posible... ¡ Cuanto me hicieron falta tus palabras viejo, tu analisis de la realidad, tus hipotesis de futuro, y tu inequivoca mirada de hacia donde ir y con quien...!

Pero estuve en la Plaza en 27 y 28 de Octubre, junto a mi familia y a muchos compañeros, abrazados al duelo compartido, con la alegria y la esperanza de nuestra juventud comprometida. Y entonces entendi que habiendonos quedado sin papeles frente a lo inexplicable y sorpresivo, la respuesta estaba alli... Ya es hora de que "la pena se transforme definitivamente en militancia",  por que el futuro esta marcado como nunca antes  por la construccion colectiva de la realidad que tantas veces soñamos. Y es AHORA!

Por eso hoy estas palabras, por eso hoy este recuerdo, para tener claro de donde vengo, y cual es mi ADN. En estos dias me gusta pensar que cada cosa que hago en lo personal y en lo colectivo, tiene la marca indeleble que me dejo mi viejo. Y espero de la misma manera poder transmitirsela a mis hijos. Siento que es el legado que mi viejo me dejo, y la forma en que trascienda su mejor mensaje, el de no bajar nunca los brazos y seguir luchando a pesar de todo, inclusive a pesar de la tristeza.